Indudablemente Teodoro Obiang cree que el uso de la violencia es la única manera de derrocar a su régimen, al menos hasta que llegaron las revueltas del mundo árabe y el norte de África donde pudo constatar que los pueblos pueden liberarse de las dictaduras a través de medios no violentos. Pero a pesar de todo esto, sigue obstinado en la idea de que el pueblo ecuatoguineano sería incapaz de levantarse como acaban o siguen haciendo estas otras naciones. Una cosa parece ser cierta, es que sabe que a pesar de toda la permisividad que otorga a los actores externos para saquear los recursos naturales del país, con el fin de garantizar la impunidad y el silencio de la comunidad internacional a sus actos de barbarie que lleva y sigue cometiendo contra su población, muchos ya están hartos de él. Al menos es lo que se percibe en base a sus últimos discursos y declaraciones sobre todo en contra de Occidente. Con citas como: “Hay que ser vigilantes. No escuchéis las críticas del Occidente. Estados Unidos, Francia y España quieren hacernos lo que han hecho en Libia para sacarnos el petróleo. Yo no soy como Gadafi”.

Se sabe que últimamente, Teodoro Obiang en reiteradas ocasiones ha estado advirtiendo a sus colaboradores militares, muchos de los cuales ha atribuido cargos como generales, tenientes, sin tener la mínima instrucción militar, para que estén preparados a una posible invasión extranjera, a defender los bienes que han adquirido. No pretendo afirmar o negar la existencia de un plan de intervención en el caso que Obiang utilice la violencia sobre el pueblo en un acto público de protesta no violenta, pues no falta razones para ello, como tampoco le falta enemigos externos que se han visto traicionados en negocios oscuros y que le quieren ver caer.

Muy consciente de este hecho, no ha escatimado medios para acumular un arsenal bélico, derrochando fortunas de dinero que podría haber empleado para calmar la ira de su indefenso pueblo que solo pide vivir en libertad y con dignidad. Pero la explicación más lógica parece ser el de los demonios del pasado. Ha hecho tanto daño a nuestro pueblo que ya no concibe la idea de dejar el poder sin rendir cuentas ante la justicia. Como tampoco en 20 años de explotación petrolera ha podido evaluar si podría haber ganado al pueblo, implementando una mejora de sus condiciones de vida.

La represión está a la orden del día en Guinea Ecuatorial, es el terreno que mejor está dotado. Por esta razón viene diciendo que el que quiere tomar el poder en Guinea Ecuatorial tiene que hacer lo mismo que hizo. Sin embargo si utilizamos la violencia para liberarnos de su régimen, aprovecha para señalarnos como elementos desestabilizadores que quieren poner en peligro las inversiones que sus socios poderosos tienen en Guinea Ecuatorial. Así justifica todas las represiones de las que somos objeto.

En las dos revueltas del pueblo Bubi, tanto en el régimen de Macias Nguema como en el suyo, ha hecho uso de la represión con una excesiva brutalidad, con muertes, torturas y desapariciones.

Otras de las brutalidades han sido los asesinatos periódicos con pretextos de intentos de golpes de Estado, que ninguno ha llegado al estado de ejecución, sin embargo la represión ha sido lo bastante fuerte como para hacer una demostración de fuerza. Todos estos hechos, por muy nobles y valientes que hayan sido, se han llevado en el terreno donde Teodoro Obiang está más dotado y preparado. Sin embargo, el problema con estos actos es que deja a la población cada vez más indefensa, con mucho más miedo, pero a la vez les marca psicológicamente, de tal forma que les hace creer ciegamente que solo se puede acabar con la dictadura a través de medios violentos. Si las veces anteriores se ha fallado, se tendría que organizarse mejor y volver a intentarlo.

Sin embargo con el miedo que el pueblo padece casi no se atreve y espera una salvación externa. Esta situación le permite al dictador ir ganando tiempo a la vez que se consolida con la desesperación del pueblo, adquiriendo más adeptos listos a entrar en el sistema represivo al no ver ya ninguna otra solución viable. Solo esto puede explicar que a estas alturas Teodoro Obiang siga contando con un ejército de guineanos listos a cumplir sus órdenes de reprimir a sus propios paisanos, que sigan habiendo agentes informadores que le suministra información, para detener a indefensos que solo piden vivir en libertad y con dignidad

Lo que es más, tiene que inventarse periódicamente falsos golpes de Estado o complots de desestabilización para hacer una demostración de fuerza a su pueblo, como el secuestro de cuatro ciudadanos en Benín y su posterior asesinato en Malabo el 21 de agosto de 2010. Los encarcelamientos de opositores políticos o gente que simplemente le hace sombre. Todo eso para mantener al pueblo en un constante estado de shock, pero además demuestra al pueblo que si piensan que las potencias como Estados Unidos, Francia o España, que tienen sus intereses en Guinea vendrán a salvarnos, tendremos que esperar un buen rato, pues les interesa los recursos naturales que explotan que las míseras vidas de los pobres mentales que somos nosotros según él. Cosa que sigue siendo cierta. Con todo esto, solo nos hace pensar en la opción violenta. Y como sabe que el pueblo está asustado, su estrategia funciona a perfección. Y rectifico seguía funcionando a perfección.

Pero hoy día 15 de mayo del 2013 el pueblo de Guinea Ecuatorial tiene que haber constatado que la Lucha No Violenta es la mejor opción a seguir para acabar con éste régimen.

El anuncio de la manifestación ha dejado paralizado al país.

Hago un llamamiento a todos los Guineo Ecuatorianos que estamos fuera del país a organizarnos. A dejar de lado todas nuestras diferencias de etnia, región, provincia, ideología política y unirnos para llevar a cabo las movilizaciones en cualquier lugar que nos encontremos, sobre todo en las capitales de las tres potencias con mayor influencia en nuestro país que son Madrid, Paris, Washington y otras capitales donde puedan haber guineanos.

El 26 de mayo puede ser la fecha de una movilización, la facha que enviemos una señal a nuestro pueblo que en vez de ir a votar en estas farsa de elecciones, aprovechen esta oportunidad para ir a concentrarse en la plazas del país. Que se organicen también para este gran día.

El 26 de mayo, como Teodoro Obiang nos lo quiere vender o bien lo quiere vender a la comunidad internacional, no habrá elecciones libres y democráticas. Jamás las puede organizar.

No podemos seguir respetando unilateralmente las leyes de un dictador cuando él mismo no las respeta.

No vale más decir ante la comunidad internacional que el día 26 de mayo no se puede organizar manifestaciones porque coincide con el día de las elecciones que a todas luces sabemos que serán fraudulentas.

Voy acabar con esta cita de Dr. Gene Sharp: “al depositar la confianza en los medios violentos, se ha escogido precisamente el modo de lucha en el cual los opresores siempre tienen la superioridad. Los dictadores pueden aplicar la violencia irresistiblemente.”

Con la lucha no violenta podemos ser libre y derrocar al régimen de Teodoro Obiang, cuente con los apoyos que cuente, tenga todos los armamentos sofisticados que tenga.

PUEBLO DE GUINEA ECUATORIAL LEVANTEMONOS Y LUCHEMOS POR NUESTRA LIBERTAD.

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