Desde el punto de vista orgánico, dejamos sentado que, los problemas surgidos en la Coalición –la publicación del panfleto titulado “explosión en la CORED” y el COMUNICADO correspondiente de la CORED— han quedado resueltos. La CORED no volverá sobre los mismos porque tiene otros asuntos más serios, en los que ocupar su tiempo.
No obstante lo anterior, como una fuerza política que está al servicio del Pueblo, nos creemos en la obligación de explicar al Pueblo guineano lo que ha pasado. Es decir, el intento de sabotear la CORED y evitar así que los que han detentado el poder en Guinea, en los últimos cuarenta y cinco años, lo pierdan. Porque, no sólo tienen un concepto patrimonial del Estado, sino que utilizan el poder como refugio, para no responder por sus fechorías ante el Pueblo. Así pues, este peligro ya ha quedado conjurado. La CORED sigue adelante, con más vigor, si cabe. Hasta que alcance sus objetivos programados.
Los intentos por neutralizar a la CORED, para evitar que un proyecto político nuevo, distinto, en el que sus integrantes no están unidos por los hipotéticos cargos que puedan detentar, sino por el proyecto mismo, sabíamos que proliferarían. Los que se han enriquecido grotescamente en Guinea, en estos últimos años, acosta de la miseria y el sufrimiento del Pueblo guineano, como buenos mafiosos, no saben sino comprar voluntades. Ésta es la historia.
Problemas internos
Contrariamente a lo que afirmaba don Filiberto Ntutumu Mebale Andeme, en el panfleto publicado en “Radio Macuto”, y que firmaba con el seudónimo de “Acamayong”, quien venía bloqueando la actividad de la Coalición no era su Secretario Ejecutivo, sino el entonces Representante de la CORED en el Reino Unido, don Salomón Abeso Ndong.
En efecto, después de la reunión de Paris, según el programa trazado, la segunda etapa del proyecto de la CORED era ir a Londres para organizar la segunda conferencia de Prensa; misión que se encargó a Salomón como representante y residente en Londres. Lo primero que tenía que hacer era alquilar la Sala de Conferencias, con la suficiente antelación, para dar tiempo a los demás compañeros a acomodar su viaje –compra de billetes, reservas de hoteles, etc.– a su horario habitual. Pues, don Salomón empleó cuatro meses para este cometido.
Esta sorprendente pérdida de tiempo, en algo tan sencillo, originó fuertes enfrentamientos entre él y el Secretario Ejecutivo, quien se vio obligado a alertar a los compañeros sobre la estrategia de sabotaje interno, en el seno de la CORED, puesta en práctica por don Salomón. Hasta les distribuyó un manual sobre cómo detectar los ataques internos en una organización.
Lo sorprendente fue que, en lugar de encontrar apoyos en todos los compañeros para zanjar el problema a tiempo y continuar los trabajos programados, nos encontramos con que don Salomón ya había comprado voluntades, lo que le permitió formar una camarilla para seguir intrigando.
El trabajo interno se hacía engorroso, la torpeza y la modorra se apoderaba de la Coalición. No se avanzaba en el trabajo por las discusiones internas y los enfrentamientos en las reuniones. Los mayores intervenían para calmar la situación. Incluso se congeló cualquier solución drástica. Pero, cuando la CORED se encontró con el panfleto de don Filiberto, ya no quedó otra solución que proceder como se hizo.
Cuántas veces se mintió al pleno acerca del alquiler del local para la reunión. Lo que ya incomodó a los mayores. Y estos anuncios de alquiler se hacían cuando ya el Secretario Ejecutivo decía que, desde Parías, había gestionado la locación de una sala por internet.
Los mayores volvieron a pedir calma, y que se siguiera confiando en nuestro Representante en Londres. Hasta el Secretario Ejecutivo contribuyó con el envío de doscientos euros, para el alquiler del local (ver P1 abajo). Pero la gestión, por parte de don Salomón, seguía bloqueada.
Cuando el Secretario le pregunta si ya, finalmente, había pagado la sala, le dice que no, y este fue el encontronazo definitivo. Con tanta falta de respeto y boicot, los otros miembros autorizaron al Secretario ejecutivo a asumir la organización de la conferencia desde Paris. Cosa que ha hecho. Con el disgusto de don Salomón, convencido como está de que nadie más maneja fondos en la Coalición. Los compañeros se habían cansado de sus maniobras dilatorias. De hecho cuando supo que el secretario ejecutivo ya lo estaba organizando, reunión rápidamente con su camarilla, que le aconsejo que encontrara una sala inmediatamente. Al pie del texto, tienen el comprobante del contrato de alquiler de la sala celebrado por don Salomón (P3), para el 10 junio del presente año, con la finalidad de organizar la misma conferencia por la que el Secretario Ejecutivo ya había alquilado otro sala para el 28 de mayo (P2).
Don Salomón, consciente de haber perdido la confianza del Secretario Ejecutivo y viendo que la situación se le había escapado de las manos, en lugar de recapacitar y pedir una reunión, entre todos, para buscar una solución, prefirió la huida hacia delante, propiciando el panfleto “explosión en la Cored” y convocando un acto en Madrid, sin ninguna virtualidad. A la CORED no se le toma por montera.
El pretendido acto de Madrid sólo tiene por objeto sustituir al actual Secretario Ejecutivo, para nombrar a otro que él pueda manejar desde la sombra. Por eso intenta comprar las voluntades de dos veteranos, curtidos en numerosas batallas políticas. Probablemente, dos de los hombres más curtidos de la Oposición guineana en el exilio, prometiéndoles el mismo cargo. Así propone al Dr. Don Samuel Mba Mombé pagarle el billete, con todos los gastos, para venir asistir al encuentro de Madrid, y le votaría como el nuevo Secretario Ejecutivo. Dice lo mismo al don Francisco Ela Abeme, nuestro Decano. Es decir, quiere manipular a dos mayores con el simple objetivo de destruir la CORED.
¿El reglamento interno le permite a don Salomón convocar reuniones extraordinarias a espaldas del Secretario Ejecutivo? No puede organizar la reunión de Londres, porque, en muchas ocasiones, alegaba que le demos tiempo para reunir el dinero, y así pagar todos los gastos y hacer un macro evento, de repente, ya tiene medios para organizar un encuentro en Madrid pagando todos los gastos.
Ante tanta burla y falta de respeto, mientras estábamos analizando qué medidas tomar contra el grupo de intrigantes, va don Salomón y ordena a uno de sus incondicionales más impulsivo para que publique el panfleto de todos conocido: “explosión en la CORED”. Sólo para hacer daño. “Delendaes la CORED”.
Pues bien, para no destruir el proyecto, que es lo más importante, ante este comportamiento de alta traición, el Secretario Ejecutivo, consultados los demás miembros, aplicó, con todo el dolor, la letra del Reglamento interno.
La aparición de la CORED ha despertado demasiadas expectativas en nuestro Pueblo, como para que la Coalición no esté a la altura de las circunstancias, por actuaciones de espontáneos. No queremos que se refleje en la CORED la tétrica Historia que ha convertido a la Independencia guineana en pura alucinación.
Hay un sector social de Mongomo, integrado por los que, expoliando las arcas del Estado guineano, se han enriquecido grotescamente, cometiendo toda clase de fechorías, que vive obsesionado temiendo las represalias que pueden seguir a la pérdida del poder, por lo que prefiere seguir escudado en el poder, sin darse cuenta de que es, precisamente, esta actitud la que causa desesperación en nuestro Pueblo. Y es la que puede provocar la explosión final. Es este sector el que ha querido venir a controlar la CORED, y, al no lograrlo, ha intentado destruirla.
Profundizando en este problema interno de Mongomo
En la CORED nos constaba que don Salomón Abeso Ndong pertenece a este núcleo duro de Mongomo; que es sobrino de Felipe Ondo Obiang; ha sido encarcelado junto a su tío y ha sufrido serias torturas. Sabemos que, en el Régimen de Mongomo, ni siquiera Obiang está seguro. Es algo que heredaron de Macías.
Por eso, y al amparo de su discurso inicial de la no violencia, entendíamos que su presencia en la CORED era necesaria. Serviría de interlocutor válido para que Mongomo entienda que el cambio que propicia nuestra Coalición no es contra un Distrito o un pueblo, sino para que Guinea Ecuatorial pueda prosperar en libertad, en democracia y en paz.
Nos parecía que don Salomón era el hombre indicado para darle profundidad al proyecto de la CORED, pero se ha precipitado, haciendo gala de una ligereza de cascos impropia de un hombre de su pretendida valía.
Pero desde el minuto cero ya se había posicionado en el campo de los que pretenden que el poder no debe salir de Mongomo, por las múltiples razones que nos constan a todos. Los que han matado con Obiang, se han enriquecido y temen por su futuro; los que han enriquecido y han comprado voluntades de gente de otras Regiones, que albergan los mismos temores. Saben que, en Guinea, no tomaremos atajos: no habrá borrón y cuenta nueva.
Salomón tenía la misión clara de trabajar para sus hermanos; por eso quería controlar la CORED, buscar un reconocimiento internacional y abrir campo a la estrategia de complot, para retener el poder, contra vientos y marea. Es “vox populi” en Guinea, la lucha interna en Mongomo, viendo ya el final del reino de la arbitrariedad. Cada clan busca su lugar a la sombra.
De ahí la consigna clara recibida: O CONTROLAS LA CORED O LA DESTRUYES.
Para ello empezó a comprar voluntades y tentar a los veteranos. Lo que nos lleva al segundo análisis.
El eterno debate de la colaboración y compra de voluntades
Toda la actual estrategia de este sector de Mongomo obedece a una filosofía, la que se inspira en el miedo del pueblo de Mongomo a lo que vendrá después de que pierdan el poder. Por eso son alérgicos a todo cambio que no puedan manipular o controlar. Y, por controlar el poder, son capaces no sólo de enrocarse y escudarse en el poder, sino de comprar voluntades de gente de otras Regiones o Distritos. Ya lo vimos el otro día, cuando los llamados Partidos legalizados en Guinea –algunos con más siglas en el anagrama, que militantes– se levantaron todos a la una, como en Fuenteovejuna, contra la CORED, al menor ademán del autodenominado Partido Democrático de Guinea Ecuatorial.
En consecuencia con todo esto, la CORED les reta a estos señores, que han querido apoderarse de la Coalición, a que demuestren con pruebas al Pueblo guineano el dinero que dicen que ha recibido el Secretario Ejecutivo. En caso contrario, que reconozcan que han mentido al Pueblo.
Don Salomón Abeso Ndong empezó a intrigar desde la Cumbre fundacional de la CORED en París. Desde que recibió una llamada de sus hermanos, militares de alta graduación del Ejército guineano.
Salomón acudió a los económicamente débiles y que ambicionaban el poder. Buscaba reunir el “quórum” para hacerse con la Secretaria Ejecutiva de la CORED. Sus dotes persuasivas de predicador evangélico le han llevado a arrastrar a personas que creyeron en sus promesas. Así han ido cayendo los cuatro que le han seguido en su aventura.
Pero, en la CORED queremos ser duros y somos duros en el fondo, pero flexibles en las formas. Hay que echar a Obiang del poder, pero dándole una salida digna, si hemos optado por la no violencia. Sabemos que Obiang es dictador –y no porque dicta normas, como dice él, en su supina ignorancia–, pero no podemos dirigirle una carta, en la que se le pide la apertura de un proceso democratizador, encabezada así: Señor Dictador…
La CORED no es una plataforma bananera. Es un proyecto político nuevo y distinto, cuya filosofía política se inspira en el Panafricanismo de Kwame Nkrumah y Marta Moumié y se consolida en el patriotismo de Lumumba. Si queremos llegar al poder, no es para estar, sino para hacer cosas… Llevar el desarrollo armónico a todas las Regiones más deprimidas de África, democratizar nuestro Continente, despojándonos del complejo de negros predestinados a ser los parias de la Tierra, para que ganemos el respeto de nuestros Pueblos y del mundo, valiéndonos del mejor instrumento que un responsable político puede poner al servicio de su Pueblo, el poder político. La CORED, si llega al poder en Guinea Ecuatorial, tiene el firme propósito de catapultar a Guinea, en diez años, al club de los países desarrollados y democráticos del mundo. Haciendo que transite, de un Estado de tribus o clanes, de estirpes, familias y casas, a un Estado de Derecho, mediante el imperio de la Ley. La CORED quiere poner fin a la corrupción, mejor dicho, a los corruptos, por ser el sumidero que traga la dignidad de nuestros Pueblos. Guinea ya ha alcanzado su independencia, lo que quiere la CORED es mantenerla. Para lo que necesitamos de gente preparada y dispuesta a servir a su Pueblo, al Pueblo de Guinea Ecuatorial. Los que son incapaces de entender todo esto, no pueden caminar con nosotros.
Y cuando uno se guía por este firme propósito, cuando uno alimenta un proyecto tan ambicioso y digno, no puede estar en la almoneda. A los miembros de la CORED no se nos compra, ni nos dejamos vender. No somos muertos de hambre. Somos intelectuales de alta formación, profesionales de probada eficacia y políticos de curtida experiencia.
Bien, después de estas obligadas explicaciones, llegamos a las siguientes.
CONCLUSIONES:
Sobre Mongomo
La CORED quiere dejar claro que es consciente de la pugna interna que existe entre las distintas facciones del poder Mongomo, pero no tiene el más mínimo interés en participar en ella, ni ser objeto de la misma.
La CORED fue creada para acabar con el actual estado de cosas en Guinea Ecuatorial, sin odios ni ánimos de venganza. Su obligación es democratizar nuestro país. Conciliar al Estado guineano y su sociedad. Esclarecer todos los crímenes cometidos en Guinea Ecuatorial, desde el asesinato de don Mariano Mba Micha hasta hoy. Consolidar nuestra economía. Poner en marcha un sistema judicial serio, eficaz y homologable con los sistemas judiciales que imperan en los países organizados. Montar nuestro sistema defensivo. Crear un sistema sanitario punta y dotar al país del mejor sistema de educación. Educar a nuestro Pueblo en el respeto a nuestros ecosistemas, y, finalmente, convertir a Guinea Ecuatorial en un país normal.
Pueda que el núcleo duro de los irreductibles de Mongomo intente aventuras golpistas, ante la clara decrepitud de Obiang, para evitar la pérdida del poder, pero la CORED está y estará para levantar al Pueblo guineano, ante cualquier intento de eternizar la tiranía. En este sentido, la CORED advierte, además, a este sector de irreductibles que, intentar sostener la Dictadura con las armas, en una Región tan soliviantada y cada vez más inestable como es la nuestra, es pecar de ingenuidad.
Que las bandas internas de Mongomo piensen en el Pueblo guineano, y, en lugar de arrastrar al país en su desgracia, que propicien un cambio para la democratización de Guinea Ecuatorial, o nuestro Pueblo les pasará la factura. Hay mucha gente buena de Mongomo que pide un cambio, consciente de que el poder que detentan, desde hace cuarenta y cinco años, se ha agotado. Porque es insostenible.
Advertimos a todos los que, no siendo de este sector de Mongomo, han servido a este Régimen y siguen sirviéndolo. No hay otro camino. Y si seguís oponiéndoos al cambio, el Pueblo guineano, dentro de poco, os lo demandará.
A los detractores de la CORED
A los que habéis querido destruir la CORED lanzando libelos, pese a que sois conscientes de que es una alternativa fiable y viable, deciros que el camino de la libertad es muy largo, y, por vuestra valía, seguro que volveremos a encontrarnos.
Alguien habló de la misteriosa carta de la CORED al Presidente Obiang, bien, publicado el texto íntegro de la misiva, se vio que no había misterio. Que su texto podía ser firmado por cualquier compatriota que quiere retornar con dignidad a su tierra y verla democratizada. Ahora os pedimos que os suméis al proyecto. Dadle una oportunidad a vuestro país.
Demostrad que aún lo amáis y que estáis dispuestos a poner fin a su sufrimiento.
Hagamos, entre todos, viable la alternativa de la CORED.
Dado en París, Francia, a mayo de 2014.
PRUEBAS
(P1) Comprobante de la transferencia bancaria del secretario ejecutivo a don Salomon Abeso
(P2) Contrato de alquiler de la sala de conferencia celebrado por el Secretario Ejecutivo.
P3-Contrato de alquiler de la sala de conferencia celebrado por don Salomon Abeso.